El silencio es miedo (Parte 1)

«El silencio es miedo» es una revista autofinanciada que durante años se publicó y repartió en Palencia de forma totalmente gratuita, aunque por llegar, ha llegado a más de media España, e incluso ha visitado algunos países de América. Con el apoyo de las librerías locales se cubrían parte de los gastos y, sobre todo, los lectores tenían un punto fijo en donde hacerse con ella, para leer, para participar, para llevársela a alguien… También tenía formato digital, y eso es lo que os traigo hoy, junto con la invitación a participar, ya que, con la pandemia la versión en papel perdió el sentido; además, yo tampoco tengo ni el tiempo ni las ganas de hace unos años, por lo que tampoco me he movido mucho para sacar nuevos números… ahora bien, nació como una revista para todos, no para mí, y si hay gente que quiera publicar, la revista continuará.

Os dejo los números publicados hasta el momento, por si queréis pasar un rato leyendo a un montonazo de autores diferentes, entrad en la que queráis pinchando en la imagen:

Nuestro primer número, con los textos de algunos colegas y de gente que acababa de conocer en Twitter. Perdón por la maquetación de mierda, fui aprendiendo poco a poco xD.

En el número dos se suman escritores palentinos, y continúan algunos de internet. En este momento quería que todas las portadas fueran con marionetas, pero esa idea pronto quedó sin recorrido xD.

Gracias a una amiga consigo una portada de un muy bien pintor de Huelva, hecho originalmente para decorar el telón de un teatro. Llega a la revista nuestro ensayista de cabecera, también del sur… esa colaboración terminó, por cierto, con un precioso recital por su parte aquí en Palencia.

En este cuarto número la portada es de una ilustradora palentina, y en los textos empiezan a colaborar algunas personas que terminarían por constituir el esqueleto de los recitales y actividades que, hasta día de hoy, seguimos haciendo en nuestra ciudad y, a veces, fuera de ella.

Aquí se acaban las marionetas, porque llega el ilustrador que hará las portadas durante una buena temporada, y que no era otro que mi panadero. Esto refleja muy bien el espíritu de la revista. La colaboración en los textos sigue en la línea de los números anteriores. (La maquetación sigue siendo horrible).

Aquí comienza una dinámica con Laura, una de las poetas que más ha participado en la revista, en donde ella responde con su poema a los editoriales. Y comienzo a aprender algún truquito, muy básico, de maquetación.

En este número queda reflejada una de las muchas actividades que hicimos varios colaboradores de la revista, en esta ocasión, junto a los usuarios de un club de lectura de Aspanis.

En este número se dedica una parte a otra de las actividades que llevamos a cabo, un «Slam poético» que hicimos en un instituto. Por si alguien tiene dudas, todas estas actividades las hicimos, por supuesto, sin cobrar ni un duro. En cuanto a los textos, siguen colaborando algunos habituales, y se unen otros que terminarán por serlo, la dinámica de cada número.

Más colaboradores, otra actividad… en este punto, la revista tenía un carácter muy marcado, y debo decir que estaba muy contento con ello, es la época que más disfruté del proyecto.

Mismo procedimiento, colaboradores y actividad… solo que en esta ocasión, la actividad es de las que más me marcó a nivel individual. Fue un taller de escritura creativa en un instituto, que duró un trimestre, a clase semanal. Hasta ese punto solo había hecho talleres puntuales, nada que se alargara tanto en el tiempo… ahora (seis años después), en parte me dedico a ello, y me encanta.

Y hasta aquí esta primera parte del repaso por «El silencio es miedo», en la próxima entrada os dejo el resto. ¡Disfrutad de las lecturas!